En el año 2023, con motivo de la tramitación de la Ley de Familias en España, que finalmente quedó suspendida por la convocatoria de elecciones, CoPPA trasladó a los distintos grupos parlamentarios un conjunto de propuestas y sus justificaciones, entre ellas la necesidad de aumentar los días de permiso laboral retribuido en el caso de muerte de un familiar cercano.
Ahora, el periódico El Confidencial se hace eco de estas propuestas en un reportaje titulado “15 días si te casas, dos si se muere tu hijo: por qué no aumenta el permiso por muerte de familiar”, en el que cuenta con los testimonios de la Dra. Elsa Alonso, médico psiquiatra y miembro de CoPPA especializada en síndrome de estrés postraumático y duelo, así como de la abogada María González Lacabex, asesora jurídica de nuestra entidad.
Las expertas de CoPPA consideran que los dos días de permiso actualmente reconocidos por el Estatuto de los Trabajadores de España para quienes han sufrido la muerte de un hijo, hija, pareja o familiar cercano son claramente insuficientes. Así lo expresa la Dra. Alonso en el reportaje: “En los primeros días tras el fallecimiento, la mayoría de las personas se sienten aturdidas y confundidas y no pueden empezar siquiera a procesar la pérdida. Reconocer la pérdida sufrida, sin exigencias laborales, inmediatamente después de la muerte de un ser querido, en el momento en que el duelo estalla de forma aguda, es esencial y humanitario”.
CoPPA explica que un insuficiente período de duelo, además de difícil de procesar, supone el riesgo de que diversas problemáticas que suelen ir asociadas a estos episodios de cambio vital, se vean incrementadas.
Durante el duelo se produce un aumento de la presencia de las hormonas del estrés y de la presión arterial. “La avalancha de hormonas y neuroquímicos puede causar un conjunto de síntomas, incluidas alteraciones del sueño, ansiedad, agotamiento y cambios en el apetito, entre otros, que pueden afectar también la salud física, incluyendo un mayor riesgo de problemas cardíacos y una reducción en el funcionamiento del sistema inmunitario”, indica la Dra. Alonso. Los estudios muestran que la muerte de un familiar cercano puede provocar problemas de fatiga, memoria, concentración, angustia y ansiedad, pudiendo incluso ser un evento traumático e impactar en el bienestar emocional, conductual, cognitivo, físico, social y financiero de la persona y está relacionado con la aparición de problemas psicológicos y de salud física.
Además de por el poco tiempo para asimilar lo ocurrido, este tipo de problemas pueden agravarse en situaciones donde existe escaso apoyo social o un insuficiente reconocimiento del entorno respecto a la profunda pena y dolor y las exigencias físicas y mentales que puede suponer para el individuo la pérdida sufrida. Esto es lo que ocurre cuando la persona se ve obligada a presentarse en el trabajo a los pocos días del suceso traumático, en un contexto profesional, donde una pérdida difícilmente podrá ser expresada abiertamente. Carecer del tiempo y el espacio necesarios ante el episodio traumático que ha tenido lugar, puede favorecer un duelo prolongado y desencadenar problemas de salud mental y física, así como, en consecuencia, una afectación al rendimiento laboral. En este sentido, algunos estudios con personas en situación de duelo indican que la presión laboral condujo a bajas por enfermedad de largo plazo o duración.
La mayor paradoja y contradicción, la encontramos al comparar los 2 días previstos actualmente cuando la persona trabajadora pierde, por ejemplo, a un hijo menor, frente a los 15 días dispuestos por contraer matrimonio o registrarse como pareja de hecho.
En el marco de la tramitación de la Ley de Familias la pasada legislatura, CoPPA mantuvo reuniones con los partidos del arco parlamentario para conseguir la prolongación de este permiso que fueron muy positivas. “La comparación que les hemos mostrado con el número de días previsto para bodas resulta tan escandalosa como ilustrativa, y así nos lo han manifestado”, explica González Lacabex. “Las y los parlamentarios con que hemos conversado constatan que efectivamente aumentar el número de días de permiso por duelo responde a un sentimiento y demanda de la inmensa mayoría de la ciudadanía”.
Cada situación es diferente y el duelo dependerá de la relación con la persona fallecida, su rol y las circunstancias de la muerte. En cualquier caso, como CoPPA expuso a los legisladores, se considera que un permiso de 7 días hábiles (9 días si el fallecimiento ocurre en otra localidad), sería un mínimo en el caso de fallecimiento de cónyuge, pareja o familiar de primer grado, como un hijo o hija.
Aun así, la entidad considera que un permiso más largo sería preferible. El riesgo de repercusiones psicológicas e impactos en la salud física es además mayor en casos de muerte de hijos o hijas menores o de parejas jóvenes, y cuando la muerte se produce de forma inesperada o súbita (por ejemplo, por accidente de tráfico) y más aún en los casos de muerte por violencia.
Los siete días mencionados serían el mínimo requerido para reducir el riesgo de repercusiones emocionales y físicas pero un permiso más largo, como ya es el caso en algunos países, sería deseable y conveniente.
Además, desde CoPPA se recuerda que sobre esta materia existen ejemplos cercanos, como el de Portugal, donde el Código de Trabajo fue modificado a través de la Ley 1/2022, de 3 de enero, para incrementar el permiso retribuido por fallecimiento de descendientes hasta los 20 días y, posteriormente por la Ley 13/2023, de 3 de abril para ampliar los permisos por fallecimiento del cónyuge o pareja también hasta los 20 días. En Francia, la Ley 2023-622, de 19 de julio para reforzar la protección de las familias de niños con una enfermedad o discapacidad o víctimas de un accidente de especial gravedad, incrementó de 5 a 12 días el permiso laboral por el fallecimiento de un hijo o hija. También destaca el caso de Chile, que también aprobó en 2022 una modificación en este sentido, como una herramienta para "humanizar la legislación laboral".
En la presente legislatura CoPPA ha reiterado a los grupos parlamentarios ésta y el resto de sus propuestas de enmiendas al proyecto de Ley de Familias. Entre ellas se incluyen también mejoras para que la ley considere ciertas necesidades de las familias que conviven animales, así como la inclusión de permisos laborales para caso de muerte o necesidad de cuidado por fuerza mayor de un animal de compañía.
Reportaje El Confidencial: 15 días si te casas, dos si se muere tu hijo: por qué no aumenta el permiso por muerte de familiar